*Rumbo a la elección de 2024, el PAN tiene amplias posibilidades de volver a ganar la presidencia municipal, pero la única manera de asegurar el triunfo es solamente candidateando, ya sea al diputado Román Cortés o bien al alcalde Pedro Rodríguez.
ATIZAPÁN.- Rumbo a la elección de alcaldes del próximo año, los institutos políticos se preparan y van apareciendo perfiles de los posibles abanderados, quienes aspiran a la presidencia municipal, en lo que se espera, será una contienda electoral altamente competida, debido a que empata con los comicios federales, donde se definirá quién estará a cargo de la administración federal los próximos 6 años.
Es importante mencionar, que en la actualidad, Atizapán está gobernado por un alcalde de extracción panista, siendo esta demarcación uno de los principales bastiones de Acción Nacional en el Estado de México y “la joya de la corona” del panismo en territorio mexiquense, ya que es el partido predominante en las elecciones locales.
Tan es así, que la confianza de la ciudadanía se ha sostenido mayoritariamente y por casi 3 décadas de manera favorable para el panismo -con mínimas interrupciones-, que hoy continúa siendo percibido por los atizapenses como la opción de gobierno más viable y la única que les ha permitido mejorar su calidad de vida.
Dentro de los “presidenciables”, un perfil fuerte es el del propio munícipe Pedro David Rodríguez Villegas, quien tiene a su favor el incesante trabajo que ha venido realizando para bien de los atizapenses, en rubros como obras públicas y seguridad, siendo reconocido su gobierno por los logros alcanzados, dentro y fuera del Estado de México.
Sin embargo, una de las debilidades del actual alcalde, es que al ser la segunda ocasión que encabeza el gobierno local, resulta inevitable el desgaste político que significan algunos de los problemas que aquejan a la población, como la escasez de agua potable y por lo consiguiente, ello se traduce en puntos negativos.
Otro perfil que pesa y que podría convertirse en un candidato idóneo, es el legislador Román Cortés, quien cuenta con una trayectoria limpia, pues ha sido diputado local y federal, consejero estatal del PAN, con más de 15 años en el partido y no trae negativos que disminuyan su fuerza.
De hecho, solamente Pedro Rodríguez y Román Cortés, representan la posibilidad de la continuidad de Acción Nacional al frente del gobierno de Atizapán, puesto que los otros partidos, apenas se encuentran en una fase de reorganización, como en el caso de morena, cuyos militantes y liderazgos quieren encontrar la fórmula para sacar adelante la elección de 2024, pero desconfiando unos de otros, se han visto en la necesidad de signar pactos de unidad, con miras a no seguirse fracturando más de lo que han estado y porque lo que tienen no les alcanza para competir.
A una escala de menor potencial político, se encuentra la diputada federal por el distrito XIV, Ana María Balderas Trejo, quien realiza un importante trabajo legislativo, pero a la cual se señala de haber sido la responsable de que el PAN perdiera la alcaldía en 2018, cuando fue derrotada por morena.
Por morena, se menciona a la ex alcaldesa Ruth Olvera Nieto, quien no sería la mejor opción para las huestes de López Obrador, toda vez que lejos de ser factor de unión, causó la división y encono entre los morenistas, aunque el partido guinda tiene perfiles frescos, como la ex candidata a diputada Bárbara González, el síndico Isaac Omar Sánchez y Leylany Richard.
Por parte del Partido Verde, se encuentra el ex alcalde Gonzalo Alarcón, quien contribuiría a la debacle de los ecologistas, debido a que cuando fungió como presidente municipal, se vio envuelto en un escándalo de millonario desvío de recursos que estuvo a punto de costarle estar tras las rejas.
Si bien las posibilidades para el PAN de refrendar en la alcaldía son reales, todo dependerá de que ese partido tome las decisiones más adecuadas, ya que de no ser Román Cortés o Pedro Rodríguez, corre el riesgo de que morena recupere la presidencia municipal.