En un juego de drama puro y nervios destrozados, el cual se alargó hasta el tiempo extra, los Chiefs de Kansas City, se convirtieron en los campeones del Súper Bowl 58, ganando su cuarto campeonato y segundo al hilo.
El partido se tuvo que definir en un quinto cuarto y en los últimos segundos, con un marcador de 25 a 22, donde los 49s de San Francisco no pudieron frenar a la poderosa ofensiva de los Jefes, comandada por Patrick Mahomes.
El juego estuvo empatado hacia el final 19 a 19, lo que forzó el tiempo extra, mientras que la afición que acudió a Las Vegas, se debatía en lo dramático, sin que se viera a uno de los dos equipos con certeza como posible ganador.
El Super Bowl 58 tuvo en el medio tiempo la presentación espectacular del cantante Usher, quien deleitó a un público que gozó y sufrió durante todo el partido.