La aplicación estadounidense de comida a domicilio, Uber Eats, ofrece reparto con robots en una zona de Tokio, Japón.
El país modificó sus leyes de tráfico para permitir la circulación de robots de reparto en sus calles; por lo que otras empresas, entre ellas Panasonic, también están probando la entrega de mercancías a través de estas máquinas.
Se mueven a 5,4 kilómetros por hora y disponen de sensores para evitar peatones y otros obstáculos, aunque siempre hay un operador humano preparado para intervenir en caso de que aparezcan problemas.