*La Fiscalía General de la República, advierte que se valdrá de todos los medios legales a los que tiene derecho, para combatir un acto que calificó como una injusticia, ya que se está afectando así a los bienes de la nación.
ALMOLOYA DE JUÁREZ.- Pese a que estaba a punto de ser vinculado a proceso, el ex secretario general del gobierno estatal, Ernesto Némer Álvarez, junto con otros ex funcionarios y ex ejecutivos de la empresa Aleática, antes OHL, el juez que se encuentra en el penal del Altiplano de este municipio, determinó su exoneración de los cargos de utilización ilegal de una vialidad propiedad de la nación (Viaducto Bicentenario), al igual que de asociación delictuosa.
La parte acusadora en este caso, fue la Fiscalía General de la República (FGR), institución que hizo ver que la resolución del juez representa una auténtica burla, constituye la consumación de una injusticia, pero dejó en claro que ejercerá los recursos jurídicos necesarios para revertir la mala decisión que de un plumazo, borró toda culpabilidad en dichas personas.
Cabe recordar que Ernesto Némer y Luis Gilberto Limón Chávez, quienes acudieron a una audiencia en los juzgados federales, fueron investigados por su presunta responsabilidad en los delitos de explotación ilegal de un bien público y asociación delictuosa, amparados en una concesión ilegal.
Con dicho ilícito, el Estado le permitió a un particular el saqueo superior a los 8 mil millones de pesos por dicha explotación ilegal, correspondiéndole el 99.5% de los ingresos totales, de esa vía federal, compartiendo con el Gobierno del Estado de México 42 millones de pesos, equivalente al 0.5%. Lo anterior, sin que la Federación recibiera en 15 años dinero un por la explotación de un bien propiedad de la Nación.
De acuerdo con la FGR, “el Gobierno del Estado de México nunca obtuvo concesión federal para poder disponer del dominio de una vía de comunicación federal, propiedad de la Nación”. Por lo tanto, había elementos constitutivos de un delito, pero Némer, personaje muy cercano al ex gobernador y ex presidente, Enrique Peña Nieto, ahora puede reírse de las imputaciones en su contra. La justicia fue pisoteada.